ROSQUILLAS DE SAN BLAS

Como ya os comenté, vamos con los dulces que se asocian a una festividad. Hoy 3 de febrero es San Blas. 

Pamplona rememora la costumbre de sacar a la calle en tal día como hoy puestos de venta de rosco, rosquillas y tortas, a los que se atribuye la virtud de ir contra las afecciones de la garganta y los catarros, y de procesionar la imagen del santo que sale de la iglesia de San Nicolas, donde también se bendicen los alimentos (Festividad de San Blas en Pamplona)

INGREDIENTES

550 g de harina común

5 huevos M

50 g de azúcar

115 ml de aceite de oliva suave

2 cucharadas de anís

GLASEADO

2 claras de huevo

1 cucharada de anís

200 g de azúcar glass

PREPARACIÓN

Manos a la masa.... Batimos los huevos con el azúcar en un bol. Añadiremos el anís y cuando empieza a espumar añadimos el aceite. Integramos todo y vamos incorporando la harina poco a poco, al principio con una espátula y cuando la masa nos lo permita con las manos. Debe quedar una pasta lisa pero manejable, sin que se nos peque a los dedos.

Calentamos nuestro horno a 170º. Mientras tanto vamos formando las rosquillas ( podemos hacer una bolita y hacer un agujero para ir agrandándolo o bien podemos hacer churros e unir los extremos).

Pasamos las rosquillas ya formadas a una bandeja de horno con papel parafinado y cuando este listo el horno a la temperatura adecuada, las horneamos durante 20 minutos.

Mientras tanto vamos a preparar el glaseado que le dará el toque característico a nuestras rosquillas de San Blas.

Batimos las dos claras y cuando las tengamos firmes añadimos la cucharada de anís. Poco a poco sin dejar de batir las claras incorporamos el azúcar glas tamizado.

Pasado el tiempo de horneado, ponemos nuestras rosquillas sobre una rejilla a enfriar para después pasarlas por una de las caras por el glaseado y las dejamos secar.

Este proceso puede ser lento, así que para acortar tiempo lo que podemos hacer es poner el horno totalmente frío y calentarlo a 50º para así meterlas y que se sequen durante 6-8 minutos.